Disfagia orofaríngea: qué muestran los estudios por imagen

La disfagia orofaríngea es la dificultad para iniciar la deglución, debido a alteraciones en la fase oral o faríngea. Se asocia frecuentemente a enfermedades neurológicas, trastornos musculares o lesiones estructurales de la cavidad oral y la faringe. Identificar la causa subyacente es clave para prevenir complicaciones como aspiración pulmonar, neumonía o desnutrición.
Los estudios por imagen desempeñan un papel esencial para evaluar la anatomía, la funcionalidad de la deglución y la posible aspiración. Entre las herramientas más utilizadas destacan:
Videofluoroscopia de la deglución
También conocida como estudio de deglución modificado o esofagograma dinámico, es el método de referencia para valorar la disfagia orofaríngea. Permite observar en tiempo real el paso del bolo alimenticio desde la cavidad oral hasta el esófago proximal, identificando alteraciones en la coordinación de músculos, tiempos de tránsito y eventos de aspiración o penetración laríngea.
El paciente ingiere diferentes consistencias mezcladas con contraste baritado mientras se registran imágenes dinámicas. El radiólogo y el equipo multidisciplinario pueden analizar fases específicas para planificar intervenciones terapéuticas o adaptaciones dietéticas.
Endoscopia de la deglución (FEES)
Aunque es un procedimiento endoscópico más que imagenológico convencional, la endoscopia endonasal con evaluación de la deglución se ha convertido en complemento valioso. Permite visualizar directamente la faringe y la laringe antes y después del paso del bolo, detectando residuos faríngeos, penetración o aspiración, especialmente útil cuando no se dispone de videofluoroscopia o para seguimiento frecuente.
Estudios complementarios
En casos seleccionados, la tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM) aportan información sobre lesiones estructurales, masas, tumores o anomalías congénitas que puedan obstruir o afectar la vía de deglución. La ecografía también puede emplearse para valorar la movilidad de la lengua y de los músculos suprahioideos.
La disfagia orofaríngea requiere una evaluación integral. Los estudios por imagen son aliados fundamentales para diagnosticar la causa, valorar la seguridad de la deglución y guiar la rehabilitación. Su correcta indicación y ejecución ayudan a reducir riesgos y mejorar la calidad de vida de los pacientes.