Protocolo interhospitalario de actuación en las salas de radiología intervencionista durante la COVID-19
La COVID-19 es actualmente una pandemia que se propaga de persona en persona mediante secreciones respiratorias, como una gripe común, de tal forma que el virus es liberado al hablar, toser o estornudar. Por esto la OMS ha designado definiciones operacionales para manejar la vigilancia de casos, sujeta a los cambios e información de cada país.
Los médicos radiólogos deben conocer los hallazgos por imagen de COVID-19 de acuerdo con los métodos de diagnóstico. Para el protocolo en la sala de intervención/hemodinamia, los servicios de radiología e imagen, con preferencia a pacientes con COVID-19, la preparación de la sala debe ser adecuada y temprana para reducir la exposición a trabajadores de la salud como a otros pacientes.
El objetivo será el garantizar todas las medidas de prevención y seguridad para el personal de salud que participan en los procedimientos, por lo que se dan las siguientes recomendaciones:
- Formación de equipos dentro del servicio: distribuir las actividades en días y horarios alternos para que se tengan turnos rotatorios.
- La atención en la sala deber ser exclusiva por el personal capacitado en realizar el o los procedimientos.
- Todo material usado y no usado se debe desechar y considerarse como infeccioso, por lo que debe colocarse en bolsa o contenedores rojos.
- El equipo de ultrasonido, las maquinas de anestesia, inyectores y aparatos de monitorización deben usarse con fundas de plástico transparente que permitan su uso.
Sobre las consideraciones a los pacientes, el personal administrativo debe coordinar la agenda de pacientes para evitar la coincidencia de pacientes que entran y salen. Realizar un checklist de seguridad en cada uno de los pacientes y en caso de movilizarlos deben portar mascarillas quirúrgicas en todo momento. En el caso de pacientes sanos o sin sospecha, deben extremar las medidas de prevención, poniendo énfasis a los pacientes de cuidados intensivos, urgencias o adultos mayores.
Continuando con el personal médico, de enfermería y auxiliares, estos deberán realizar el lavado de manos (40-60s), portar mascarilla quirúrgica o N95 y en dado caso pantalla plástica, así como bata estéril e impermeable con doble de guantes estériles. Con los médicos residentes deberán aplicar igual los pasos anteriores y gestionar el trabajar con estudiantes a residentes vía online.
En la colocación del equipo de protección antes y después de cualquier procedimiento, tiene un orden en cuanto a vestimenta y colocación del equipo personal para evitar riesgo a contagio. A continuación, se enlistan:
- Retirarse reloj, pulseras y todo tipo de accesorios.
- Recogerse el cabello y en hombres, no llevar barba.
- Zapatos cerrados y colocación de botas o calzas desechables.
- Colocarse equipo de protección radiológica: lentes plomados, protector tiroideo y mandil plomado.
- Protocolo de lavado de manos.
- Colocar mascarilla N95, ajustar la manda metálica del puente nasal y cubrir hasta el mentón.
- Ajustarse los lentes de protección radiológica.
- Gorro desechable, nunca de tela.
- Realizar segundo lavado de manos.
- Ponerse la bata quirúrgica estéril e impermeable.
- Colocarse el primer par de guantes.
- Ingreso a la sala e inmediatamente colocarse el segundo par de guantes.
Al finalizar cualquier procedimiento se debe retirar el equipo de protección de acuerdo con lo establecido dentro y fuera de la sala.
Protocolos aplicables a lalimpieza de espacios
Por el protocolo de limpieza de la sala, el tiempo de duración de la COVID-19, en aerosoles es de 3 horas, mientras que, en plástico, acero inoxidable, cobre y cartón, hasta 72 horas después de su aplicación en dichas superficies. Se requiere de una limpieza a fondo antes de la desinfección y esterilización de alto nivel. Se recomienda el uso de germicidas químicos que proporcionan desinfección de nivel bajo o intermedio para SARS, ya que estos desactivan el virus debido a sus propiedades físicas y químicas similares.
Las áreas que han sido utilizadas por pacientes sospechosos o confirmados de COVID-19 deben ventilarse adecuadamente. En situaciones sin ventanas o sistemas de ventilación cerrada deben usarse filtros de HEPA (partículas de aire de alta eficiencia). Se recomienda mantenerse apagado el aire acondicionado para evitar la contaminación a salas contiguas.
El manejo de residuos derivados de tareas de limpieza y desinfección de uso convencional en ambientes hospitalarios, se manejarán como infecciosos o peligrosos. En tanto, los textiles deberán ser lavados usando ciclos de agua caliente a 90 °C con detergente regular.
Las medidas anteriores se están implementado paulatinamente en los centros hospitalarios desde el inicio del brote en nuestro país, para intentar lograr reducir la exposición de los trabajadores de la salud y otros pacientes. El objetivo será el de implementar en forma oportuna y consistente estas medidas al servicio, no solo para las enfermedades infecciosas actuales (COVID-19), sino también para las futuras.
Cornelio-Rodríguez, et al. (2020). Protocolo interhospitalario de actuación en las salas de radiología intervencionista durante la COVID-19. Anales de Radiología, Mexico, 19(3), 262–275. https://doi-org.udlap.idm.oclc.org/10.24875/ARM.20000073